Viajar en un vehículo-vivienda es una tendencia en todo el mundo. Por ese motivo se buscan opciones para hacerlo de una forma que permita transportar más elementos. Una de ellas es la posibilidad de llevar un remolque en una autocaravana. Pero para hacerlo, debes de cumplir con ciertas reglas establecidas. Si quieres saber más sobre el tema, sigue leyendo el artículo de hoy.
¿Puedo arrastrar un remolque detrás de una autocaravana?
Sí, se puede. Tienes que considerar que para llevar un remolque en una autocaravana necesitas un buen enganche.
Lo habitual en estos casos es el utilizar una barra de remolque. Esta barra será la encargada de unir la autocaravana con el remolque. Además, sería conveniente añadir algún tipo de seguridad adicional.
¿Qué remolque puede llevar una autocaravana?
El tipo de remolque que puede llevar una autocaravana es aquel que no supera los 750 kg. Esto en el caso de que se conduzca con un carnet de conducir tipo B.
Si se acopla un vehículo a la autocaravana, la misma no debe superar en su conjunto los 3500 kilos. Pero además, ese segundo vehículo o remolque, como se indica anteriormente, no debe superar los 750 kg.
Remolques ligeros (menos de 750 kg)
Son los más comunes para enganchar a una autocaravana sin necesidad de tener un carnet especial para conducir. Una de sus ventajas es que no necesita matrícula independiente ni seguro adicional, siempre que la carga no sea profesional o comercial. Se recomienda para el traslado de bicicletas, equipamientos de camping o motocicletas ligeras.
Remolques pesados (más de 750 kg)
En los casos en que el remolque supere los 750 kg, se considera un vehículo pesado. Por lo tanto, tiene que tener su propia matrícula, seguro e ITV. Para no pasarse de peso hay que sumar todo el conjunto, es decir, tanto la autocaravana como el propio remolque.
En la mayoría de los casos, se necesita una autorización adicional como el B96 o el B+E para circular legalmente.
Remolques de carga, motos o embarcaciones
Para el transporte de motos, quad o embarcaciones pequeñas, se suele utilizar un remolque extra. Debe estar firmemente anclado y la carga bien distribuida. Esto es clave para evitar desplazamientos y mantener la estabilidad del conjunto durante la circulación y las maniobras.
Remolques con sistema de frenado
En muchos remolques pesados, se incorpora un sistema propio de frenado que es obligatorio por ley cuando se superan los 750 kg. Este sistema mejora la seguridad al frenar, sobre todo en pendientes o maniobras bruscas. Es obligatorio para remolques que superen los 750 kg.
Requisitos legales para llevar remolque con una autocaravana
Más allá del tipo de remolque, dependiendo del que se elija, será necesario cumplir con algunos requisitos legales claves.
Cálculo del peso máximo autorizado (MMA y MMR)
Previo a realizar el enganche del remolque en la autocaravana, será necesario que mires algunos datos:
- MMA (Masa Máxima Auto hículo y del remolque.
- MMR (Masa Máxima Remolcable), que puede ser con o sin freno.
Esos valores se encuentran siempre en la parte de la ficha técnica de la autocaravana y son los que determinan cuánto peso se puede remolcar. Debes sumar el peso total de la autocaravana y el remolque. Con el carnet B, el conjunto no puede superar los 3.500 kg de masa máxima autorizada.
ITV y homologación del conjunto
Cuando vas a circular habitualmente con el remolque, hay que pasar la ITV en conjunto. Si el enganche no es original del fabricante, se debe homologar la instalación aportando certificado de montaje y documentación técnica.
Carnet de conducir necesario para llevar remolque con autocaravana
Si el remolque es ligero, es decir, de menos de 750 kg y en conjunto no se superan los 3.500 kg, se puede ir con el permiso B.
Ahora, en el momento en que se excede ese límite, puedes necesitar una autorización extra. Si el conjunto pesa hasta 4.250 kg, necesitas el B96. Si supera esa cifra, será obligatorio el permiso B+E. Recuerda que es obligatorio tener el carnet de conducir indicado para cada caso.
¿Qué puedo remolcar detrás de mi autocaravana?
Básicamente, lo que se desee. Tanto si se quiere llevar un vehículo extra como un remolque de cuatro ruedas.
A lo que hay que prestar atención en todo momento es al peso final. Es decir, el peso del remolque y lo que vaya con él, no debe superar en ningún momento al peso admitido por la autocaravana.
Este es un detalle no menor, pues de lo contrario va a ser un problema y se estarán infringiendo algunas leyes. Y por supuesto, se pondrá en peligro tanto a los pasajeros como al resto de conductores.
Lleva siempre contigo un seguro barato para una autocaravana para que te cubra ante cualquier siniestro. Revisa muy bien las garantías que se incluyen.
¿Remolcar un coche puede dañar mi autocaravana?
No. Si se cumple con las condiciones de seguridad y se tiene en cuenta el peso, no debería por qué. Es importante para ello revisar cuál es el peso máximo admitido con el fin de no superarlo. Si se llegara a pasar entonces sí se corre el riesgo de dañar la autocaravana.
¿Cuáles autocaravanas pueden remolcar un coche?
Las autocaravanas que pueden remolcar un coche son las que se consideran de clase C. Esto quiere decir que son aquellas que tienen una longitud que va entre los 640 y 1249 centímetros. A ello se le suma que la capacidad que admite llevar una autocaravana varía entre los 1.500 kg a los 3.650 kg. La cosa cambia cuando lo que eliges es una autocaravana que sea de superclase C.
Estos vehículos tienen un motor lo más parecido al de un camión. Gracias a ello, podrán transportar remolques de mayor capacidad, llegando a los 18 mil kg.
¿Cuánto peso puede remolcar una autocaravana de clase B?
La autocaravana que se conduzca con carnet de conducir de clase B puede llevar hasta 3500 kg de MMA. A eso se le suma que el remolque o lo que sea que lleve acoplado no puede superar los 750 kg. Por lo tanto, llevar una moto en autocaravana es posible, siempre que se cumpla con las condiciones anteriores.
Cómo elegir un enganche de remolque para autocaravana
Como hemos visto, para llevar un vehículo o remolque, es fundamental hacerlo con total seguridad. Para ello, hay que saber exactamente qué se debe comprar, de lo contrario, se pondrá en riesgo a los pasajeros y resto de vehículos.
Barras de remolque
Son unas barras que permiten ajustar el vehículo. Cuando vayas a comprarlas, tienes que asegurarte de que sean de la medida requerida.
En la mayoría de los sitios de venta de este tipo de accesorios tienen unas guías que te ayudarán a tomar la decisión. Sobre la instalación, es bastante sencilla, ya que no hace falta hacer ninguna perforación o soldadura.
Si eres de los que viaja a sitios con muchas rocas o que tiene suelo irregular, será mejor elegir un tipo específico de barra de remolque.
Esta barra de remolque debe de ser especial para vehículos todoterreno. De esa forma, va a permitirte desengancharlo en cualquier superficie sin miedo a que haya un siniestro.
Si utilizas unas barras de remolque normales, corres el riesgo de que no se desbloqueen. Esto es habitual en los suelos que son más rocosos o que tienen algunas irregularidades en superficie.
Cables de seguridad
El remolque que se lleve en la autocaravana debe de estar bien iluminado. Generalmente, traen incluido el cableado, pero si no fuera así, se debe comprar aparte los cables de iluminación.
En cuanto a los cables de seguridad, son un elemento exigido por ley si se va a usar una barra de remolque. Estos sirven para evitar el desplazamiento del vehículo en caso de que la barra llegue a dar algún fallo.
Receptor de RV
Es uno de los elementos más importantes de todos. Si llegas a comprar una barra de remolque que no coincida con el receptor de RV no podrás llevar el remolque. Revisa muy bien que el receptor sea el adecuado.
En las autocaravanas se incluye un receptor cuadrado de 2 pulgadas. Suele ser más que suficiente para las barras de remolque. Pero por si acaso, mejor siempre reconfirmar para no cometer errores.
Esperamos que estos consejos te sean de mucha utilidad. No olvides hablar con tu asesor para asegurarte de que cuentas con la cobertura necesaria de tu seguro de autocaravana y evitar problemas a posteriori.
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