Como cualquier otro tipo de contratación que se vaya a hacer, es bueno contar con un simulador de seguro náutico. Estos nos dan una idea sobre cuánto costaría el seguro y cuáles serían las mejores opciones.
Más allá del simulador, en el seguro de embarcaciones de recreo o cualquier otro, es bueno tener un asesor o experto que nos guíe en la elección. Este puede adaptar la selección a aquellos seguros que cumplen lo que tú y tu embarcación necesitáis.
Factores que determinan el precio de los seguros de embarcaciones
Existen algunos factores que pueden determinar el precio y si es mejor tener un tipo de seguro u otro como los siguientes:
- Zona de navegación: el seguro varía mucho según cuál sea la zona en la que se va a navegar. Esto se debe a que no es igual hacer uso de la embarcación en distintos lugares. Y tampoco los riesgos a los que estamos sometidos. Otro detalle en ese aspecto es la cobertura de la Responsabilidad Civil Obligatoria. Esta cobertura no siempre cubre la navegación en aguas continentales.
- Embarcación: la embarcación puede utilizarse como forma de recreo. Pero también de forma profesional o para participar en alguna competición. Sus usos son diferentes y así como el tipo de embarcación. Esto sin duda influye en el precio final.
- Antigüedad de la embarcación: es otro de los puntos que puede hacer que varíe el precio final. Como en el caso de los seguros de coches, se revisan los años que tiene la embarcación. Esto va a definir si hace falta contratar alguna cobertura extra o no.
Con la ayuda de una correduría escogerás el que más te conviene
Junto con una Correduría de Seguros, podrás encontrar el seguro que más se adapte a ti y a tu tipo de embarcación. Recuerda que además de obligatorio, es sumamente importante que tengas un seguro adecuado para navegar tranquilo.
Una vez que te hayas decido por un seguro de embarcaciones, tendrás que presentar la documentación del vehículo y patrón. Se comprueba ficha técnica del barco para declarar la información correctamente en la póliza.
Hay una diferencia importante entre quien es el tomador del seguro, propietario y patrón. En las dos primeras figuras puede ser una persona física o jurídica. Por ejemplo, el asegurado puede ser el dueño de la embarcación, que en este caso también sería el tomador del seguro.
Pero también está la figura del patrón, que es quien está autorizado a hacer uso de la embarcación pues su trabajo es conducirla.
Todos estos detalles son fundamentales a la hora de contratar los mejores seguros de embarcaciones y navegar tranquilo.